Digo adiós

Digo adiós tragando saliva porque la vida no se puede tragar de otra forma.
Supongo que en los finales hay un punto que es distinto a todos los suspensivos
que le preceden.
Será el último vómito que todavía le queda a lo que me aferro.

Tragando saliva.

Para decirle adiós bonita.

Adiós preciosa.

Adiós mi vida.